El edificio de 1,300 m2 de construcción y 1,229 m2 de terreno se encuentra en obra gris listo para ser acondicionado, con acceso pavimentado por la carretera transpeninsular colindante a la carretera escénica. En la zona hace falta negocios del giro médico y de la salud.


Se propone el uso del edificio para un centro geriátrico. La población adulta mayor está creciendo de manera acelerada. Se prevé que para 2050 las mujeres de 60 años y más representan 23.3% del total de población femenina y los hombres constituyan 19.5% del total de la masculina, siendo un sector atender con un alto potencial de negocio.


La propuesta va dirigida al mercado de -Turismo de retiro- que encuentran en Baja California un servicio de alta calidad por hasta un tercio de la tarifa de su país de origen. Según la encuesta Genworth Cost of Care, el costo promedio nacional de una habitación semiprivada en un asilo de ancianos en Estados Unidos es de $94,900 dólares al año, mientras que una habitación privada cuesta aún más, $108,405 dólares por año.

La ubicación del edificio frente al mar le daría al centro geriátrico el sentimiento de relajación, privacidad y contacto con la naturaleza.


Los servicios que se pueden ofrecer:


Manutención con seguimiento de las dietas adaptadas a las necesidades de cada persona y sus prescripciones médicas.

Atención sociológica y psicológica.

Rehabilitación muscular.

Vigilancia y cuidados del estado de salud y personales.

Actividades ocupacionales y culturales para que los residentes se mantengan activos.

Talleres y actividades para estimular la mente con el fin de prevenir o controlar la demencia

Servicios que pueden proporcionar ingresos extras al establecimiento.

Se proyectan 32 camas con un ticket promedio de $50,000 MXN por cliente.

Cuenta con anteproyecto realizado por Inside Out Arquitectos.